El 2018 está a punto de comenzar, y en lo que al sector inmobiliario se refiere podemos observar determinados vestigios que nos señalan cuáles serán las tendencias del mercado, en la mayoría de casos siendo la continuación de las líneas que ya desde finales de este año se han comenzado a trazar.

Es cierto que vaticinar lo que el siguiente curso nos depare y pretender acertar de pleno es poco menos que una osadía, pero también lo es que el sector ya no sufre los vaivenée de los años pasados recientes, y esto facilita mucho las labores de previsión.

Cabe destacar que el panorama geopolítico en Europa ha provocado que las buenas predicciones para 2018 se suavicen y pasen por el filtro de la mesura necesaria a la que el contexto invita, hecho que no ha menoscabado el atractivo del mercado inmobiliario para los inversores, siendo la relación entre riesgo y rentabilidad muy sugestiva.

También llama la atención la búsqueda de productos hasta ahora poco explorados como alternativa a los clásicos bienes inmobiliarios, y hoteles o residencias estudiantiles o para la tercera edad comienzan a ser también vías de inversión rentables.

A parte de lo ya señalado, podemos coincidir en que las tendencias para 2018 responderán en gran medida a ciertos patrones:

Alquiler. Muchas de las personas que intentan acceder a su primera no pueden hacerlo debido a una su incapacidad económica, lo que les empuja directamente a un mercado del alquiler que está alcanzando sus cotas más altas en los últimos años. Sin embargo, es bastante probable que los gobiernos locales tomen cartas en el asunto con el propósito de que también los jóvenes puedan acceder a la compra de vivienda; en este sentido, fórmulas como el alquiler con opción a compra se antojan especialmente útiles e interesantes.

Compra. Continuando el párrafo anterior, a lo ya expuesto se añade la mejor predisposición de las entidades bancarias para la concesión de hipotecas.

Tecnología. No es ningún secreto, ni descubriremos la panacea si afirmamos que la tecnología seguirá ocupando cada vez más terreno en este y otros sectores: la inteligencia artificial, que ya ahorra costes y aumenta la productividad en las empresas que la han implantado será la gran protagonista en este sentido, tanto en 2018 como en los años futuros.

Inversión. La mencionada inestabilidad política, tanto a nivel europeo como en los últimos meses en España, han puesto palos en las ruedas de una inversión que, sin embargo, se prevé recupere la fuerza con la que comenzó 2017 el año próximo.

Puntos estratégicos. Madrid y Barcelona son, a nivel nacional, las dos ciudades que más inversión reciben y las que más atractivas siguen siendo para la inversión; sin embargo, otras urbes como Bilbao, elegida Mejor Ciudad Europea para 2018, también se postularán como excelentes alternativas.