Algunas podrán tomarlo a broma, pero este año y más concretamente durante los meses de verano, en España se ha alcanzado el máximo histórico de hipotecas a tipo fijo concedidas en nuestro país.
La evolución de las hipotecas entre tipo fijo y variable se ha visto modificada en los últimos años culpa de la crisis que sufríamos allá por el 2008. Fechas en las que el número de hipotecas concedidas en nuestro país, pocos años antes, ascendía hasta la cifra de casi 130mil hipotecas constituidas en Septiembre del 2005 y donde el porcentaje de hipotecas fijas no superaba el 1,5% – 2% de las concedidas.
En cambio, desde el año 2016 hemos acontecido un increíble aumento de las hipotecas constituidas a tipo fijo, llegando a día de hoy a suponer el 40,6% respecto a las constituidas a tipo variable. El dato es curioso, pero parece que en el mercado existe una prudencia que intenta – aún con un coste superior a corto plazo – salvaguardar el posible pago potencial de elevados intereses en el futuro culpa del tipo variable.
A día de hoy entendemos que esta es la tendencia (la de constituir la hipoteca con el banco a tipo variable) pero ningún experto se atreve a asegurar con rotundidad cuál de las dos opciones será la mejor para el pago de nuestras futuras letras al banco.